Por involuntario que sea, es una buena oportunidad para desestresarse y probar cosas que hayas querido hacer pero que por motivos de tiempo o estrés no hayas hecho. Todo esto asumiendo que existe el tiempo, dinero y soporte familiar para hacerlo obviamente. Es su momentito para descansar el cerebro y juntar energía para el próximo desafío.
Pasé por una situación extremadamente similar. Mi consejo es que reflexiones sobre las cosas que te hicieron falta para continuar, y trates de adquirirlas durante este tiempo, para que la próxima vez sea más fácil. No dejes los conocimientos adquiridos de lado y de que se te enfríe el cerebro, sigue practicando todas las cosas positivas que puedas. Ejercita cuerpo y mente.
Noo que fomeeee, comprendo esa sensación. Llegó un año muy tarde jajajaja, pero por lo menos pareciera que existe determinación en este instante, lo que es bueno.